Disfrazarse es uno de los juegos favoritos de la infancia que más perdura a lo largo de nuestra vida, un jugar a ser otro u otra que nos divierte y nos invita a soñar. Y el Carnaval una cita en la que este juego de creatividad alcanza sus mayores cotas. Color, música, identidades diversas y buena compañía nos invitan a romper la rutina y salir a la calle para celebrar la Vida; aparcar los problemas, cargar las pilas y durante unos días, más que pensar, sentir.
De origen pagano que hizo suyo la Iglesia, la tradición ancestral fue recuperada por Italia y varía en el calendario a merced de la celebración de la Semana Santa. Una cita de las de “aprender viajando” que tanto nos gusta a los Cuatroabordo y que sirve para contarles que se celebra antes de la Cuaresma, antes de esos cuarenta días que ponen fin al Carnaval y que comienzan el miércoles de Ceniza para finalizar el domingo de Ramos. También para recordar Venecia, Nueva Orleans, Canarias, Cádiz… o para sacar las máscaras y disfrutar de su color y sabor ahora en Valletta.
El Carnaval en Malta es una de las grandes fiestas del país, de hecho los niños y las niñas no tienen colegio durante los cinco días en los que tienen lugar los desfiles con carrozas, gigantes y mucho humor, habiendo incluso un día dedicado al Carnaval de los niños. Los de Valetta y Gozo son los más populares y en los que destaca la influencia italiana no solo por cercanía, sino porque fue de Italia desde donde llegó el Carnaval de la mano de los Caballeros de la Orden de Malta en 1555 en la figura del Gran Maestre Piero de Ponte.
Son días de Carnaval, de ponerse el mundo por montera, de compartir risas en familia viéndonos transformados, de salir a la calle y hacerle cosquillas a la Vida porque estamos vivos, un regalo que no siempre apreciamos en toda su intensidad.
Así que no te lo pienses, coge tu máscara y… ¡feliz Carnaval!!!
La verdad es que los carnavales son una se las fiestas más divertidas tanto para el que participa como para el espectador. Me encanta vestirme todos los años junto a mis amigos en los carnavales de mi pueblo. Hacerte con tu traje de carnaval cada vez es más fácil con la gran oferta d tiendas especializadas a bajo coste . De esta forma, tu única preocupación será divertirte !!
La vida es un carnaval y si además nos invita a disfrazarnos, mejor que mejor. De niñas nos encantaba y creo que en el fondo siempre estamos dispuestas aunque a veces los años nos paren un poco…y si encima vamos a un lugar donde se celebran bien celebrados, ¿qué más podemos pedir?