Plan con perro

Parques para perros en Madrid

No es fácil, hay que reconocerlo. Sobre todo para unos Cuatroabordo especialmente urbanitas como somos nosotros. Museos, librerías, bibliotecas, iglesias, monumentos, tiendas… ¿Y nuestro Toffee? ¿qué hacemos con él? Podemos entrar a turnos, pero todavía son demasiado pequeñas nuestras hijas como para dejarlas afuera, y a mí, lo confieso, además de con ellas me encanta comentar, comparar, disfrutar de esos pequeños detalles con la complicidad única que tienes con tu compañero de vida.

Eso no quiere decir que no hagamos planes de Cincoabordo, ni mucho menos, y hoy quiero contar uno de ellos que disfrutamos el fin de semana anterior. Nos encantan los domingos en familia, y al vivir a cientos de kilómetros de donde residen nuestras respectivas familias, suelen ser fin de semanas del núcleo duro, vamos, los cuatro y el perro cuando se tercia, así como con otras familias amigas, que en ese campo somos muy pero que muy afortunados.

PARQUE PARA PERROS

Hay un parque que invita a llevar a nuestros amigos de cuatro patas en Bravo Murillo número 49 dedicado a Enrique Herreros (dibujante y cartelista de cine, que bien que lo podrían poner por aquellos de “aprender viajando”) y por el que cada vez que pasábamos por delante nos decíamos aquello de “hay que venir con Toffee”. Y al fin que fuimos, para gozo de los cinco. Había una buena pandilla de perretes y nuestro Toffee se integró a las mil maravillas.

Me gustó sobre todo ver con la naturalidad en la que se movían todos como si formaran parte del paisaje, y no me refiero solo a nuestros queridos peludos sino a la complicidad intergeneracional entre jóvenes, adultos, niños y abuelos que se respira en el parque.

COMER CON PERRO

Comer con perro

Las terrazas son lugares fantásticos para comer con perro

He de reconocer que al menos en Madrid, las terrazas están bastante abiertas a sumar al perro como invitado mientras no moleste. Algo que también sucede en Valencia, ciudad “terracera” por excelencia gracias a ese clima privilegiado que la hace tan especial.

Y el domingo tuvimos la suerte de encontrar una al ladito del parque, que con tanta carrera el apetito apremiaba. Se trata de Casa Patillas, entre Santa Engracia y Abascal, un restaurante que además de tener un menú riquísimo y a un precio excepcional, nos permitió comer con Toffee. Por no hablar de la amabilidad a la hora de atendernos. Aprovecho para decir que nosotros no solemos contar que somos una familia viajera que escribe sobre sus aventuras y propone planes en familia, con lo que las valoraciones son de auténtica madre prescriptora, sincera y desinteresada, con lo que las familias que nos preguntan y nos leen saben que lo que nosotros encontramos es lo que ellos pueden esperar.

Otro día os contaremos el día que nos llevamos a nuestro Cavalier king Charles Spaniel de Brunch, ese desayuno/comida de fin de semana al que nos aficionamos cuando vivíamos en Nueva York… ¿Brunch con perros? Sí. Y más fácil gracias a la gentil búsqueda que Sr. Perro ha hecho para quienes contamos como parte de la «manada» familiar a esos peludos fieles que amamos con locura.

Marina IZQUIERDO

Plan perro cuatroabordo

Con esos ojazos de no romí un plato nos tiene conquistados 😉

 

 

5 Respuestas a “Plan con perro

  1. ¡Es Verdad! Los pobres perros casi nunca tienen la oportunidad de acompañar a sus dueños en un viaje ya que sea a un museo, restaurante etc… Con lo buenos que son…

  2. Sí, no nos lo ponen fácil. En España todavía estamos muy lejos de Alemania, el país considerado como el más amigo de los perros. Tenemos que reivindicar espacios para que la situación vaya cambiando…Un saludo viajero

  3. Es otra de las asignaturas pendientes en la restauración española ( junto con los child-friendly restaurants). Como dueña de perro reivindico un espacio para poder ir con mi mascota pero también entiendo a aquellos a los que no les gusta la idea de compartir espacio gastronómico con «los peludos», como tu los llamas. El buen tiempo siempre es un aliado ya que nos permite disfrutar de las terrazas madrileñas y sumar al perro como invitado pero ¿qué hacemos cuando llega el invierno?.

    • Somos muchos los que nos sumamos a esa reivindicación Susana, desde el respeto para quienes no quieran compartir espacio. Pero las opciones que tenemos quieren queremos disfrutar junto a los perros, quien lo tiene sabe que es uno más de la familia, son demasiado escasas y restrictivas. Y como tú bien dices, ¿qué haremos cuando llegue el invierno? Un abrazo.

  4. Pobres perros, con lo bien que se portan. Deberían poder entrar en más sitios. Quien no tiene no lo comprende pero son uno más en la familia. Yo amo a mi perro.

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