Nací en Valencia a dos semanas vista de las fallas. Crecí con ellas, las he vivido como fallera y sin serlo, trabajado como periodista, bailado, trasnochado y compartido. Y siempre amado. A pie de la valla, como vivíamos las mascletaes de adolescentes antes de que dispusieran del cordón de seguridad, desde el balcón del Ayuntamiento entrevistando a los invitados de honor. También las he añorado en el extranjero, regresado con la emoción de enseñárselas a mis hijas, y difundido en diferentes ámbitos en los países donde he vivido.
Eso tiene ser valenciana por el mundo y respirar, hasta con sus contradicciones, ese legado único, un ADN mediterráneo que se alimenta de fuego y derrocha arte. Una celebración que merece consagrarse internacionalmente como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad de la Unesco. Tuve la suerte de vivir en primera persona, por mi trabajo, las candidaturas de la Lonja y del Misteri de Elx, ambas consagradas con la nominación, y seguro que con el tiempo, las Fallas también lo lograrán. Tienen motivos de sobra para figurar en esta lista de honor. En las Fallas confluyen todas las disciplinas artísticas y representan, además, el carácter valenciano: emprendedor y tradicional, alegre y vanguardista, talentoso y crítico. Capaz de quemar un año para que comience otro.
DEJARSE LLEVAR
Un año más, las Fallas regresan para recordarnos que el invierno termina y que los días alargan con la entrada de la Primavera. Pero, ¿qué le recomendaría a un turista o viajero que se decidiera a aventurarse esos días?
Sobre todo que se dejara llevar. Sin prisas. Desconectando. Viviendo cada instante. Con el reloj con una sola hora fija: las dos de la tarde para disfrutar del concierto por excelencia, de la partitura con corcheas de pólvora, del momento que para mí, resume como ninguno la esencia de la fiesta. La Mascletà. Arte a cielo abierto. Explosión efímera que nos recuerda cada día lo que es la evanescencia del yo, que nos grita entre carcasas “vive hoy y ahora”.
FALLAS ESPECIAL
Que recorriera la excelencia del arte escultórico en cartón piedra a través de las fallas de Especial. Y que lo hiciera de madrugada para sumarse a la despertà, ese amanecer de pólvora que despierta a los que duermen y mantiene despiertos a los que todavía no se acostaron. Y si quiere que se lo expliquen todo también puede animarse al tour que ha organizado Turismo Valencia. Los niños disfrutarán mucho con las fallas de infantil cuyos «ninots» recrean la magia del universo de los más pequeños.
GASTRONOMÍA
Que disfrutara de las terrazas, del aperitivo e incluso nuestro típico almuerzo. Que no se fuera sin comer una buena paella. Y por supuesto, ya que de gastronomía hablamos, unos buñuelos (a ser posible de calabaza) con chocolate.
MÚSICA, FLORES Y FUEGO
Que se perdiera en los barrios y disfrutara de esa celebración que toma todas las calles, plazas y avenidas de la ciudad al son de las bandas de música, muchas de ellas en casa si tenemos en cuenta que la Comunitat cuenta con el mayor número de bandas de España.
Que se emocionara con la Ofrenda, con ese desfile de color que recorre las calles de Valencia desde todos los puntos de la ciudad para alcanzar su plenitud en la plaza de la Virgen convertida durante días en un vergel.
Que viera las mejores calles iluminadas y bailara al son de las múltiples verbenas que jalonan la ciudad. Y si sus hijos se animan con los petardos, que las bombetas son inofensivas, y los chinos y los de luces también…aunque siempre bajo la vigilancia adulta.
Que no se perdiera los Castillos de fuegos artificiales en nuestro particular Central Park, los jardines del Turia, en la Alameda. Cada noche y con especial intensidad el de la del 18 con la Nit del Foc.
Que sintiera el fuego, final de fiesta, que cierra una nueva edición con la Cremà convirtiendo a la ciudad en una gigantesca antorcha, y que eligiera a su conveniencia porque el sentimiento es el mismo. Tanto en las primeras que arden, las de infantil, como en las grandes, la ganadora de Especial y finalmente la del Ayuntamiento, por ese orden. Y a cantar y a saltar y a correr de una a otra, que ya se acaba…
Que callejeara. Que hiciera de uno de los verbos más bellos de nuestro idioma santo y seña de su estancia. Aquí tiene el programa para que decida si hay algo que no quiere perderse.
Que al despertar el 20 y ver las calles regresando a la normalidad sepa que no, no ha sido sueño…
Felices fallas para quiénes las vivan, para quiénes las descubran y para quienes desde lejos, las sientan como si estuvieran allí. Basta con cerrar los ojos y respirarlas.
Valencia en Fallas, pólvora en el corazón.
Te entiendo perfectamente. Yo soy de las que se quejan por el ruido, las calles cortadas y los petardos incontrolados ….. Pero a pesar de todo eso, reconozco que son muy afortunada de vivir algo tan emocionante y mágico como es nuestra fiesta. Añoro no poder compatibilizar algo mas mi horario laboral con la fiesta, pero siempre se puede sacar un ratito . Felices Fallas !!!
Gracias Gloria, es cierto que para el día a día es complicado, sobre todo porque se sigue trabajando, pero vale la pena sortear los pequeños obstáculos porque compensa con creces. Como bien dices, emoción y magia. Felices Fallas 😉
Gracias Marina por el post, este año me las pierdo…
Gracias Silvia, me alegro que te guste. Está escrito con el corazón y desde la nostalgia que, como bien sabes, te transporta con el pensamiento. Basta cerrar los ojos…;)
El viajero agradecerá una descripción tan maravillosa y puntual de nuestra fiesta. Los que las vivimos agradecemos tanto amor en tus palabras. Felices Fallas!
Gracias Virginia, es que hay mucho amor, muchas vivencias y muchos años. También ausencias y nuevas presencias. Son como la Vida. Y además siempre dispuestas para abrir la Primavera. Felices Fallas 😉
Que completo de informacion super practica…Y los tours se pueden hacer tambien despues de Fallas?
Gracias Berta. En cuanto a los tour, ¡no se podrían hacer ni sobre las cenizas! 😉 porque al día siguiente la ciudad está tan limpia que las Fallas parecen un sueño. Pero siempre puedes visitar el Museo Fallero o el del Artista fallero. Mucho arte en ellos.
Gracias Marina. Esta vez las vivo en la distancia y con el micro en el cajón. Me ha encantado el post
Gracias Carol, escrito con el corazón y la inevitable morriña. Hemos sido muy afortunadas de haberlas vivido personal y profesionalmente. Y ya sabes, basta cerrar los ojos…;) Un abrazo fallero.